25 mayo 2016

Viento



Lo primero es moverse. Aunque carece de forma, el viento mueve todo lo que tiene forma y a través del movimiento de todo lo que tiene forma, se perciben las cosas. Al sentirlo, todo empieza a estremecerse por simpatía. (…) Los bambúes, los quicios de las puertas lo acompañan con sus voces. El polvo se arremolina, se agitan los árboles, tiemblan las casas y hasta los cables de la luz se ponen a temblar. El cielo y la tierra están envueltos por el viento. Lo primero es moverse y mientras el viento no se extinga, el movimiento profundo irá propagándose hasta el infinito. Eso es el viento. La fuerza que levanta al viento está en el fondo de todos nosotros. Al enfrentarte a lo inmóvil, no pierdas la esperanza. Si el movimiento está latente dentro de ti, se manifestará. Y una vez hayas comunicado con tu movimiento, ese mismo movimiento impulsará a otros. Que cada uno se ponga en movimiento desde sí mismo. Este es el primer paso.
Haruchika Noguchi

El katsugen undo es totalmente diferente a todo lo demás por varias razones:
• Es complementario a cualquier actividad. Sumará siempre.
• No requiere técnica ni unas condiciones físicas especiales.
• Carece de objetivos . Desde el primer momento, cualquiera se sentirá a gusto.