Para creer en el primer Buda tendría que creer que los otros animales son buenos y que no me harían daño. Entonces yo tampoco los dañaría.
Pero en realidad los animales se atienen a la ley natural y podrían dañarnos. De hecho, al final, siempre nos dañan. Yo, por tanto, me atengo a la ley natural, que está por encima de mí mismo. Ser vegetariano es contrario a esta ley.
Lama Gora Rinpoche. XVIII Karmapa
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